A principios de febrero, dos ríos atmosféricos provocaron extensas inundaciones en partes de California, al tiempo que precipitaciones récord barrían múltiples zonas, lo que llevó a la declaración de emergencia en varios condados.
Los ríos atmosféricos, que forman parte del ciclo del agua de la Tierra, transportan la humedad de los trópicos a las latitudes septentrionales, y están relacionados tanto con el abastecimiento de agua como con el riesgo de inundaciones, según la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de EE. UU. (NOAA). Se conoce como "Pineapple Express" a un río atmosférico específico con origen en el Pacífico, alrededor de Hawái, y que trae fuertes lluvias y nieve a la costa oeste de Canadá y Estados Unidos.
Dos tormentas de este tipo golpearon el sur de California con pocos días de diferencia, pero la infraestructura de “ciudad esponja” de Los Ángeles fue capaz de captar hasta 8.600 millones de galones de agua (unos 32,5 hm3), suficientes para abastecer las necesidades de más de 100.000 hogares durante todo un año, informó Wired.
Las ciudades esponja son zonas urbanas que utilizan soluciones basadas en la naturaleza para retener el agua, ralentizar la escorrentía de las aguas pluviales y mejorar la calidad del agua en el proceso. El concepto es obra del arquitecto paisajista chino Kongjian Yu, propulsor de este enfoque para hacer frente a las inundaciones urbanas agravadas por el cambio climático, que fue adoptado como política nacional en China en 2013.
Los humedales artificiales, las vías verdes, los parques, los jardines de lluvia, los tejados verdes, los pavimentos permeables y otras medidas pueden actuar como esponjas que absorben y almacenan las precipitaciones en lugar de depender exclusivamente de "infraestructuras grises" como riberas reforzadas con hormigón, tuberías, desagües y otras soluciones de ingeniería convencionales para gestionar la escorrentía de las aguas pluviales. Las ventajas de las ciudades esponja van más allá de la gestión de las aguas pluviales, ya que mejoran la calidad del agua al filtrarse la escorrentía a través del suelo y la vegetación. Además, el agua de lluvia puede evaporarse y enfriar la ciudad, ayudando a reducir las emisiones consecuencia del aire acondicionado. Las zonas verdes también actúan como sumideros de carbono y proporcionan hábitat para la biodiversidad y oportunidades de ocio.
Conocido con distintos nombres, ya sea infraestructura verde o sistemas urbanos de drenaje sostenible, el planteamiento de las ciudades esponja es una parte clave de una estrategia de planificación urbana más amplia para gestionar los recursos hídricos de forma sostenible y hacer frente a las inundaciones urbanas, clave para garantizar la resiliencia de las ciudades al cambio climático. El siguiente paso consiste en almacenar y reutilizar esas aguas pluviales para reducir la dependencia de otras fuentes de agua.
Lee el contenido original en Smart Water Magazine.